Tipos de certificaciones agrícolas

La producción agroalimentaria en España produce una gran cantidad de alimentos de calidad y materias primas para el conjunto de la población estatal, europea y mundial. Para poder garantizar la calidad de los productos agroalimentarios se han creado las certificaciones agrícolas.

En este artículo vamos a analizar en qué se basan las certificaciones agrícolas y cuales son las principales certificaciones agrícolas a nivel estatal y europeo, qué requisitos básicos se deben tener para poderse certificar y qué beneficios pueden aportar las distintas certificaciones a nuestra empresa agrícola.

¿Qué son las certificaciones agrícolas? 

Las certificaciones agrícolas son organismos públicos o privados que se basan en hacer cumplir unas normas establecidas previamente por dicho organismo, con el fin de regular y estandarizar unos parámetros de calidad de un producto determinado. De este modo, cualquier empresa o organismo auditado favorablemente puede demostrar con un documento oficial que cumple con los parámetros de calidad establecidos por dicha norma. 

En un sistema de certificación agrícola hay dos partes: el organismo que certifica y la empresa inscrita que quiere disponer del certificado conforme cumple con una normas de calidad.

Objetivos principales de un sistema de certificación agrícola:

Cualquier certificación agrícola persigue una serie de objetivos. Veamos cuales són los objetivos principales de un sistema de certificación agrícola:

• Confianza a los consumidores: el principal objetivo de cualquier sistema de certificación agrícola es proporcionar confianza a los consumidores. Las certificaciones pretenden dar ante todo seguridad en el producto. 
• Calidad: los sistemas de certificación agrícola buscan dar un sello de calidad y diferenciación en el producto certificado.
• Control: las inspecciones y controles son la base de las certificaciones agrícolas. Cualquier empresa que se quiera certificar debe asumir una serie de controles e inspecciones anuales de la entidad de control. 
• Interacción en los mercados: Las certificaciones agrícolas son marcas de calidad que permiten a los productores vender a muchos mercados y poder mejorar el precio de salida.

Tipos de certificaciones agrícolas:

Existen muchas y variadas certificaciones dentro del sector agrícola. Cada certificación pone la mirada en unos determinados aspectos. Algunas certificaciones son específicas de un determinado producto o zona y otras son más generales. También hay certificaciones de organismos públicos y certificaciones de carácter privado. Veamos cuales son los tipos de certificaciones agrícolas.  

Certificaciones agrícolas públicas:

Las certificaciones agrícolas públicas són aquellas certificaciones agrícolas titularidad de algún organismo público, como puede ser un gobierno o el ministerio de agricultura. Este tipo de certificaciones pueden ser europeas, nacionales o locales. 

En este tipo de certificaciones agrícolas el organismo de control siempre es un organismo público y el personal auditor y los técnicos són funcionarios o personal asalariado. La organización de las certificaciones agrícolas públicas es parecida a cualquier otro tipo de gestión pública. En cada región hay su organismo de control que depende de un organismo de control público superior. 

Son ejemplos de certificaciones agrícolas la certificación ecológica, la producción integrada, etc. En este tipo de certificaciones se paga una cuota anual por los servicios prestados. 

 Certificaciones agrícolas privadas:

Las certificaciones agrícolas privadas són aquellas certificaciones agrícolas de titularidad de una empresa privada que ofrece los servicios de certificación de un producto o un manejo determinado. 

En el caso de organismos privados, la organización es similar a los organismos públicos, exceptuando que el personal y los técnicos no son nunca funcionarios sino personal asalariado.

El organismo de control de las certificaciones privadas habitualmente es más general, centrándose en un país concreto y no en pequeñas regiones. 

Actualmente, hay certificaciones privadas con mucho prestigio dentro del sector agrícola. Algunas de ellas son imprescindibles para poder acceder a los mercados internacionales de exportación de frutas y verduras. 

Son ejemplo de certificaciones agrícolas privadas la certificación Global G.A.P, la certificación IFS, etc. 

Tanto a nivel público como privado, las certificaciones pueden ser de tipo local, centrándose en un territorio o región muy concreta, o de tipo global.

Certificaciones agrícolas locales:

Las certificaciones agrícolas locales son aquellas que se centran en certificar un determinado producto de una zona determinada concreta y con unas características propias y únicas. Son ejemplo de ello las denominaciones de origen protegidas (DOP) y la indicación geográfica protegida (IGP)

Certificaciones agrícolas globales:

Las certificaciones agrícolas globales son aquellas que se centran en certificar un determinado producto a nivel global. Se basan en una norma que hay que cumplir en cualquier país donde cualquier empresa se quiera certificar. Son ejemplo de ello la certificación agrícola de producción ecològica, que es igual para toda la Unión Europea, o la certificación GLOBAL G.A.P, etc.

Exigencias de cualquier certificación agrícola: 

En cualquier tipo de certificación agrícola, la gestión y trazabilidad de todo el manejo de una explotación agrícola es imprescindible para que puedan llevar a cabo el control necesario para certificarse. 

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