Los secretos del cultivo de espelta ecológica

Uno de los cereales en auge en los últimos años es el cultivo de espelta. La demanda de la espelta ha aumentado considerablemente y ya es habitual encontrar en los mercados y panaderías productos, harinas, panes y pastas hechas a base de harina o semillas de espelta. En este post nos vamos a centrar en el cultivo de espelta ecológica, conociendo el cultivo y los principales retos del cultivo de espelta en producción ecológica. 

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La espelta, un cultivo en auge en España

La espelta (Triticum spelta) es una especie de cereal de la misma familia que el trigo. El cultivo de espelta en España ha incrementado en los últimos años como consecuencia de su demanda en el mercado harinero. 

La espelta es un cereal rústico muy utilizado en la antigüedad. Con la tecnificación de la agricultura y variedades más productivas, el cultivo de espelta se vio sustituido por otros cultivos más adaptados a la tecnificación tal y como explicamos en este artículo sobre cultivos de cereal rentables poco conocidos.  

La rusticidad es la característica principal del cultivo de espelta. Se adapta muy bien en climas fríos, secos y duros. El manejo de la espelta es parecido al de cualquier otro cereal, aunque cabe tener en cuenta que se trata de un cereal más rústico y largo. Su longitud la hace más susceptible a tumbarse, por lo que se debe ajustar la cantidad de nitrógeno que se aporte en el suelo. La dosis de siembra de espelta ecológica está alrededor de 180-220 kg/ha.  

Manejo de las malas hierbas en espelta ecològica

El cultivo de ecológico de espelta implica un manejo distinto al de la espelta convencional o el de cualquier otro cereal.

Las malas hierbas son el principal problema de cualquier cultivo ecológico y la espelta ecológica no es una excepción. En el cultivo de espelta ecológica no se permite el uso de herbicidas en ningún caso y eso hace cambiar el manejo del cultivo desde buen principio. Hay dos formas de gestionar las malas hierbas en el cultivo de espelta ecológica: la falsa siembra y la grada de púas. 

Falsa siembra

La falsa siembra es una técnica muy utilizada en agricultura ecológica para gestionar las malas hierbas en cultivos extensivos como la espelta ecológica. Esta técnica consiste en trabajar el suelo como si lo fuéramos a sembrar. Una vez se ha trabajado el suelo y se ha fresado, se deja unos días para que germinen las semillas de malas hierbas que hay en nuestro suelo y que no nos interesan. 

Una vez han germinado, se vuelve a fresar el suelo y se siembra con la semilla de espelta ecológica. Esta técnica permite eliminar una gran cantidad de malas hierbas que harían competencia al cultivo ecológico de espelta que queremos implantar. 

Aunque hay semillas que tardan más tiempo en germinar, si la espelta ya se ha desarrollado, no permitirá que las malas hierbas le hagan mucha competencia y por lo tanto podrá crecer con normalidad. 

El principal inconveniente de la falsa siembra es la meteorología. En el campo, a veces va de pocos días de poder sembrar un cultivo. Si la falsa siembra se hace en un período de lluvias muy seguidas, el suelo quedará muy empapado y no se podrá sembrar pasados muchos días. Este problema puede retrasar mucho la siembra de espelta ecológica. 

Grada de púas

Tal y como hemos comentado, la meteorología no nos permite siempre realizar una falsa siembra. El sistema de grada de púas nos puede ayudar a eliminar futuras malas hierbas de acuerdo con la normativa de producción ecológica. 

Las gradas de púas son un tipo de rastrillo que se adapta en el tractor. Cuando la espelta ecológica ha germinado y ha desarrollado las primeras hojas, se procede a pasar por encima con la grada de púas. Las púas hacen roce con la tierra arrancando las malas hierbas que han germinado junto con la espelta. Está técnica se recomienda utilizarla en explotaciones cuyo tractor dispone de un sistema GPS. 

Foto de Ruralcat.gencat.cat

La espelta ecológica: un cereal nutritivo y con futuro 

En los últimos años, la demanda de espelta ha incrementado gracias a sus cualidades nutricionales. La espelta tiene un porcentaje más elevado de proteínas, aminoácidos y lípidos que el trigo, por lo que ha despertado su mayor interés en los consumidores de España, especialmente en el mercado ecológico.   

El rendimiento medio de espelta ecológica ronda los 4000 kg por hectárea. El consumo de espelta ecológica ha aumentado mucho tanto a nivel artesanal como industrial por lo que hace que sea un cereal con buena salida en el mercado.

Consulta también otros cultivos rentables en España.

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