Qué tipos de fertilizantes existen y cuáles usar
Como sabes, en el mercado hay muchos tipos de fertilizantes diferentes que varían en su presentación, composición, modo de aplicación, etc.
Vamos a intentar poner un poco de orden en el mundo de los fertilizantes para que puedas escoger la mejor opción para tu explotación. Piensa que el abonado es uno de los elementos claves para conseguir una buena producción, además de una buena calidad de producto.
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Tipos de fertilizantes: mil y una formas de clasificación
“Los abonos son un producto muy necesario en agricultura ya que aportan aquellos nutrientes que necesitan los cultivos para su correcto desarrollo y poder llegar a altos rendimientos.”
Los fertilizantes se pueden clasificar según muchos aspectos. Vamos a ver más en detalle cada una de las clasificaciones de estos para así tener claras las ideas cuando nos hablen de abonos blending, abondos de fondo o fertilizantes foliares, siempre teniendo en cuenta que un mismo abono se puede encontrar en varias clasificaciones.
Según el origen, podemos encontrar tres tipos de abono: fertilizantes de origen mineral , que pueden ser fertilizantes minerales orgánico o de síntesis: La principal ventaja de los abonos orgánicos es el aporte de materia orgánica al suelo que ayuda a mejorar la estructura de este a largo plazo. Además el nitrógeno orgánico se descompone de forma lenta y gradual por lo que se aportan nutrientes a largo plazo. En el caso de las deyecciones orgánicas el precio también es un punto muy positivo. Algunos abonos orgánicos como la materia orgánica líquida, deyecciones ganaderas ecológicas o compost están permitidos como fertilizantes para la agricultura ecológica. Los principales inconvenientes de los abonos orgánicos es su heterogeneidad y la dificultad para conocer exactamente la composición. Este problema se incrementa en el caso de deyecciones ganaderas no compostadas. Su almacenamiento y conservación son también un inconveniente respecto a los abonos minerales. Hay tres nutrientes fundamentales para las plantas. El nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K). Además también hay otros nutrientes importantes para la nutrición de los cultivos como el azufre u otros microelementos como el magnesio o boro. La primera clasificación que podemos hacer es según la presentación de los abonos. Esta clasificación es básica ya que nos indica con qué maquinaria deberemos aplicar el producto, además de la calidad del abono. Según su presentación los abonos pueden ser, según su estado: sólidos, líquidos o gaseosos. En general, los más usados son los dos primeros. Los abonos sólidos en general se aplican con una abonadora para sólidos aunque en ciertos casos se pueden aplicar disueltos en agua mediante el riego o con pulverizador. En este grupo encontrar también varias presentaciones: Además, el abono sólido lo podemos clasificar según su composición en dos categorías: blending o mezcla y complejo. La mayoría de abonos están formados por varios compuestos químicos para conseguir la composición deseada de los distintos nutrientes. Esto hace que al aplicarlos haya diferencias entre abonos blending y complejo. Los blending se distribuyen peor en el suelo que los complejos ya que según la densidad y tamaño de cada partícula de distinta composición puede llegar más o menos lejos al ser aplicada al suelo. En cambio en los complejos, como cada partícula es igual, la distribución es más homogénea. Para más información sobre abonos blending y complejos podéis ver este estudio realizado por la AIMCRA. Los abonos líquidos en general son suspensiones o soluciones de abonos sólidos en un medio líquido. Se aplican con pulverizadores o con el sistema de riego y en ciertos casos se pueden disolver en agua para su aplicación. Los abonos también se clasifican según el momento de aplicación. Además en cada momento de aplicación se suelen usar un u otro tipo de abono según su composición. El nitrógeno es un elemento muy móvil dentro del suelo por lo que se puede perder por volatilización o lavado. Por eso, recientemente están entrando con fuerza en el mercado los abonos de liberación lenta o los inhibidores de nitrógeno para fertilizantes líquidos y deyecciones porcinas. Estos productos tienen como objetivo hacer que el nitrógeno esté disponible para la planta de forma más lenta y la planta lo pueda aprovechar durante más tiempo. Al mismo tiempo se evitan pérdidas principalmente por volatilización. Como ya hemos mencionado los diferentes tipos de fertilizantes pueden tener numerosas graduaciones de los nutrientes que aportan y en el mercado hay un abanico inmenso de posibilidades. La clave para saber qué graduación de nutrientes nos conviene y con qué dosis aplicar esta en las necesidades del cultivo y en el rendimiento potencial que esperamos según nuestro suelo, cultivo, zona climática, etc… En este artículo sobre el cálculo de fertilizantes y abonado para cada cultivo puedes encontrar más información. Es importante también tener en cuenta que muchas veces la graduación del abono nos vendrá impuesta según lo que tengan disponible allí donde lo compremos. Pero variando la dosis y con un buen plan de fertilización podemos aportar aquello que el cultivo necesita. Recuerda que en todo momento desde Agroptima te podemos ayudar en el control de tu fertilización y toda aquella documentación que genera como el libro de fertilizantes.Tipos de fertilizantes según su origen
Tipos de abono según su composición
Abonos según su presentación
Abonos sólidos según su composición
Tipos de fertilizantes según el momento de aplicación
Otros aspectos importantes de los abonos
Graduación de los fertilizantes: ¿Cómo elegirlos y qué dosis aplicar?
Muchas gracias por el contenido que compartes, estoy aprendiendo mucho